Hola me llamo Mary Sofi. Trabajo como felpudo en una fábrica. Cuando llego por las mañanas me tumbo en el suelo y los empleados pasan por encima de mi cuerpo para quitarse el barro de los zapatos. Por las noches llego a casa y me pongo a llorar en la cama mientras miro la luna por la ventana. Si quieres ser mi amigo por favor escríbeme algún poema. Gracias. Adios.
domingo, 23 de septiembre de 2007
MARY SOFI
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4 comentarios:
Mary Sofi, qué ojos verdes más bonitos tienes.
Usarte de felpudo es una vergüenza. Te doblo el suelo y te vienes a casa, que se me ha echado a perder la alfombrilla del baño.
Ya ves, es tu día de suerte.
Quería decir que te doblo el "sueldo" no el "suelo".
Pero hablando de suelos, el del baño es de terrazo, ya sabes con piedrecitas pequeñas que a lo mejor se te clavan en la espalda. Si quieres no tiro la alfombrilla vieja y tú te tumbas encima de ella.
Soy así, todo el mundo me lo dice, un tipo con un corazón que no le cabe en el pecho.
Hola Sofi,
Qué nombre más bonito, tanto comoo tus ojos. Soy Borja, hijo de una baronesa muy conocida que se ata a los árboles del Prado para que no los tiren. Si, mi madre está loca. Pero hay más, mi novia va a tener un hijo que no es mío (aunque ella dice que si) y nos ibamos a casar... hasta que he visto tu foto.
Con todo mi dinero haré que dejes de trabajar. Soy un poco tonto, cuando iba a la escuela los niños me pegaban y me qutaban mii bocadillo de caviar. ¡Vaya hijosdeputa...! Necesito un alma como la tuya a mi lado.
Eres preciosa, tanto como la fuente de 15 metros que tengo en el jardín...
Te amo
Casualmente he visto tú foto y he leido tu escrito también.
Ambas cosas me han impresionado.
Por un lado tú triste mirada
a pesar de la sonrisa de tús labios
y por otro lado tú desgarrador texto
a pesar de tú ironia.
Creo que te sientes sola y sientes frialdad en el alma también,
y por eso por las noches lloras teniendo como complice a la luna
que te escucha pero calla.
Y creo que te infravaloras
y por eso por las mañanas
sientes que todos te pisotean
y que nadie se percata de lo mucho que vales y de lo mucho que puedes amar.
Quiero recordarte a Tagore:
Si por la noche lloras porque no puedes ver el sol, las lagrimas no te dejaran ver las estrellas.
Un beso.
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